Enrique Dans es toda una autoridad sobre tecnología y economía. Curiosamente su carrera comenzó en ámbitos que no parecen tener mucha relación. Según nos contó, su formación comenzó "en un área científica, la Biología, combinada con la tecnología desde un punto de vista puramente práctico, y continuó con un MBA y un doctorado en Sistemas de Información, aparte de otros estudios postdoctorales relacionados ". Aparte de dar clase en el Instituto de Empresa, desde hace unos años escribe uno de los blogs en castellano más populares. Es su otra faceta, la de divulgador. Según él, escribe en "un blog acerca de los efectos de la tecnología en personas y empresas" y se dedica "a la divulgación tecnológica a través de conferencias y artículos en medios".
En la charla que mantuvimos con él nos cuenta cómo ve la tecnología en estos tiempos de crisis, lo que nos ha llevado a esta situación y las ventajas de la tecnología para las empresas. Una visión muy interesante y esclarecedora de "un gallego [...] que tiene la suerte de adorar lo que hace, lo que le lleva a desarrollarlo a través de muchas herramientas y, básicamente, a no callarse ni debajo del agua".
¿Por qué empezaste a escribir un blog? ¿Qué fue primero, escribir o bloguear?
Decididamente, escribir. El blog lo empecé en Febrero de 2003, y en esa época ya llevaba bastantes tiros pegados en prensa, casos y papers académicos. Mis primeros artículos en prensa los escribí en 1996, pero fue a la vuelta de mi doctorado en Estados Unidos, en el 2000, cuando me encontré con la posibilidad de colaborar con prensa de forma muy habitual en el contexto de mi trabajo en el Instituto de Empresa. Entre 2000 y 2003, escribí más de ochenta artículos y sesenta colaboraciones en diferentes medios económicos y generalistas: la práctica a la hora de enfrentarme a un artículo viene de esa época, no del blog. El blog empezó en Febrero de 2003 y todavía tardó cerca de un año en adquirir cierta regularidad, cuando me di cuenta de que era una buena manera de mantener ordenadas las cosas que hacía y de enriquecerlas con la retroalimentación de los lectores.
El nuevo Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, lo tiene extraordinariamente claro: en caso de crisis, es preciso invertir en una mayor conectividad, en tecnología y en procesos más eficientes.
¿Piensas que la crisis económica va a afectar fuertemente a las empresas tecnológicas o se van a salvar de esta complicada situación?
Una crisis como ésta, más próxima a la idea de una depresión de larga duración, nos afecta absolutamente a todos. Por muy contracíclicos que puedan parecer algunos negocios - y la tecnología, cuando se plantea como vehículo de eficiencia y reducción de costes, puede serlo en muchos sentidos - existen muy pocos negocios que soporten una caída prolongada de la demanda y de los mercados secundarios. El próximo año será mejor pasarlo entero metido en una nevera...
El Embajador de la Unión Europea en EEUU dice que, en parte, las culpables de esta crisis financiera internacional que vivimos son las tecnologías de la información: la información fluye rápido, la toma de decisiones es aún más rápida, sin tener casi tiempo para analizar la situación; los accionistas quieren resultados rápidos o castigan a la empresa; al final los directivos piensan únicamente en el corto plazo y muchas veces las decisiones no son buenas en el largo plazo; de ahí el derrumbe que estamos viviendo. ¿Cómo lo ves tú?
Indudablemente, la tecnología ha aportado un mayor nivel de transparencia y de información a los mercados, haciéndolos mucho más eficientes: ahora, en lugar de operar con información incompleta o en manos de unos pocos, todos podemos tener información mucho más completa y en tiempo real. Pero eso poco tiene que ver con las verdaderas razones de la crisis: la crisis proviene de una serie de muy malas decisiones tomadas por operadores financieros que decidieron ignorar un reparto aberrante de los riesgos con el fin de llegar a sus objetivos y enriquecerse de manera irresponsable con productos que no comprendían ni ellos mismos. Pretender culpar de esta crisis a esa mayor eficiencia de los mercados obtenida en gran medida gracias a la tecnología es simplemente querer matar al mensajero, buscar culpables muy lejos de donde realmente se encuentran, y querer enmascarar actitudes que deberían ser depuradas de raíz. Esta crisis no viene del patio de atrás de las tecnológicas, sino del de las financieras. Las tecnológicas, en este caso, podrían incluso ser las que acabasen solucionando en gran medida la papeleta. El nuevo Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, lo tiene extraordinariamente claro: en caso de crisis, es preciso invertir en una mayor conectividad, en tecnología y en procesos más eficientes.
España es un mercado sumamente complejo. Los fenómenos de adopción tecnológica parten de un escepticismo generalizado y se enfrentan a un mercado de acceso poco competitivo
¿Crees que las redes sociales pueden ayudar a mejorar la productividad de las empresas? ¿Cómo?
Las redes sociales son susceptibles de proporcionar muchas cosas a las empresas: contactos para temas que van desde lo comercial hasta la selección de personal, generación de opiniones y pulso del mercado, desarrollo de comunidades alrededor de productos o servicios, etc. Como herramienta, la red social no hace más que dar un soporte tecnológico a las relaciones sociales: si tu empresa o tu marca puede beneficiarse del hecho de apalancar dichas relaciones, la red social no hará más que ayudar. Si debido al tipo de negocio, el efecto del entorno social es más bien limitado, seguirá siendo así.
En España, el emprendedor sufre un entorno en el que obtener capital resulta comparativamente mucho más difícil que en otros mercados
¿Cómo ves a España en cuanto al uso de las tecnologías respecto a otros países de nuestro entorno?
España es un mercado sumamente complejo. Los fenómenos de adopción tecnológica parten de un escepticismo generalizado y se enfrentan a un mercado de acceso poco competitivo, aunque en muchas ocasiones, sobre todo en el mercado de consumo, viven fenómenos de difusión viral muy fuertes, reflejo de una dinámica social en la que prima la imitación. En mercados corporativos el fenómeno es similar, aunque algo más moderado: escepticismo inicial, y en algunos pocos y escogidos casos, dinámicas virales que provocan crecimientos fuertes.
¿Cuáles son los principales escollos en España para mejorar nuestro desarrollo tecnológico?
Un mercado de acceso poco competitivo, y una actitud general negativa ante el emprendimiento tecnológico, intolerante ante el fallo. En España, el emprendedor sufre un entorno en el que obtener capital resulta comparativamente mucho más difícil que en otros mercados, pero en el que además, el fallo no está permitido: en lugar de considerarse una experiencia de aprendizaje, se considera una vergüenza, algo que hay que esconder. En estas condiciones, al contar con escasos "campeones locales", el desarrollo tecnológico se desarrolla por imitación del exterior, con las limitaciones que eso plantea.
Imagen | David Sifry
Autor: Alejandro Nieto González, editor de El Blog Salmón