"Lejos de bajar el ritmo, va a ocurrir justamente lo contrario: vamos a tener que trabajar más y trabajar mejor de lo que hemos hecho hasta ahora. Estoy seguro de que los ministros y ministras están de acuerdo con esa demanda... y si alguno no lo está, es el momento de hablar o callar para siempre".
Quienes lo escuchaban se rieron a carcajadas con esta última frase. Pero, aunque el Presidente Sebastián Piñera en ocasiones suele "amenizar" sus reuniones con un toque de su particular sentido del humor, al pronunciar esta frase en los minutos iniciales del último consejo de gabinete -el pasado jueves 5 de julio- no estaba precisamente bromeando.
Esa noche, el gobernante les subrayó clara y reiteradamente a sus ministros que, a pesar de que al menos cuatro (cinco, si hay segunda vuelta en noviembre) de los ocho meses que le quedan en La Moneda, estarán cruzados por la campaña parlamentaria y presidencial, no va a bajar el ritmo de trabajo. Lo remarcó con frases como "nuestra principal tarea es consolidar lo que hemos logrado", "nos queda mucho por avanzar" o que "durante estos próximos ocho meses vamos a terminar muy bien lo que ha sido un buen gobierno".
Además, no aclaró entonces si "liberará" ministros para que se vaya a apoyar a Pablo Longueira , cuestión cada vez menos probable, en tanto queEvelyn Matthei (Trabajo) -lejos la más nombrada para ese rol- está más inclinada a quedarse en su cargo hasta el final.
Varios de los integrantes del gabinete ya tenían claro que su jefe no está dispuesto a replegarse, como lo tienden a hacer los presidentes en el ocaso de su mandato. Pero que además lo reafirmara, teniendo ya un candidato único -por mucho que los pronósticos no le sean favorables a Pablo Longueira ante Michelle Bachelet-, sumado a su alta exposición pública y otras señales, propagó la convicción de algunos de que Piñera ya tiene puestas sus fichas en su mayor desafío político: intentar volver y competir como candidato único de la derecha en noviembre de 2017.
El asunto ya hace mucho es vox populi e insumo obligado en cálculos a futuro del sector, pese a que el Jefe de Estado nunca lo ha reconocido explícitamente en público. Y está tan arraigado en el corazón del gobierno, que hay ministros jugados por asegurar un colchón político-electoral y por "blindar" a Piñera después del 11 de marzo del 2014.
Nadie admite que hay un "gran plan" orquestado. Pero está claro que las opciones del Presidente dependen de: los resultados electorales del sector en las presidenciales y sobre todo en las parlamentarias; el devenir de un eventual gobierno de Bachelet; un hipotético rearme del mapa político; el cuidado de su imagen; los logros que consiga anotarse en el resto de su mandato, y si podrá imponerse sin rivales en una derecha que históricamente le ha sido hostil... pero que hoy lo tiene como su principal referente.
En su círculo reconocen que Piñera tiene una "línea de crédito" muy importante, pero que puede enfrentar obstáculos y no pocas incertidumbres.
Hinzpeter, Pérez y Espina
La difícil confección de la plantilla parlamentaria oficialista tiene como plazo fatal mediados de agosto, y de su éxito o fracaso depende el piso político con el que Piñera salga de La Moneda. RN y la UDI no pueden bajar de 52 diputados; de lo contrario, la Concertación puede conquistar el quórum de 4/7 (69 votos).
Hasta ahí, el objetivo de asegurar un buen listado de candidatos beneficia a todos: a Longueira, a los dos partidos y a Piñera. Pero el rol que juega La Moneda -a través de Andrés Chadwick (Interior, UDI), y Cecilia Pérez (Segegob, RN)- es rechazado por el presidente de RN, Carlos Larraín .
En el piñerismo sostienen que Renovación debería ser capaz, al menos, de conservar los 17 diputados que hoy tiene (ojalá elegir dos más) y no perder ningún senador. Cualquier escenario que desate una cadena de recriminaciones -como ocurrió en la pasada municipal- empañará los últimos meses del gobernante.
Tan o más crucial que lo anterior es si el piñerismo logrará o no reconquistar la conducción de RN , la que abandonó por concentrarse en la elección del 2009... lo que implica "desalojar" al larrainismo, con fuerte arraigo en las bases, y que ha cultivado ahí molestia hacia La Moneda, alimentándola con la reciente derrota en la primaria.
Estas dos aristas del futuro "colchón" político y electoral del gobernante han sido analizadas desde a lo menos seis meses por ministros leales a él, entre los que se mencionan a Rodrigo Hinzpeter (Defensa) yCecilia Pérez (Segegob), a quienes se ha unido la senadora RN Lily Pérez , ex rival del Mandatario y hoy incondicional suya. Suelen reunirse -ambos ministros han almorzado varias veces, incluso en La Moneda-, y hasta se asegura que algunos de ellos han conversado el tema con el propio Piñera , por ejemplo, en la residencia de Cerro Castillo.
En el piñerismo dicen que su candidato ideal para encabezar el partido era el ex ministro y hoy embajador en EE.UU., Felipe Bulnes . Pero éste quedó fuera de la ecuación tras ser nombrado agente en La Haya ante la demanda boliviana.
Sobre quién podría cumplir ese rol hay una incógnita. Mientras Hinzpeter y la senadora Pérez serían nombres "hostiles" para Larraín -por los choques que ambos han tenido con él-, la vocera y el dirigente tienen un vínculo que la ministra no desea romper.
En este punto se señala al senador Alberto Espina como parte de la misma "trenza", aunque en rigor sólo coinciden en que van detrás de la mesa RN. El senador ha comentado internamente que tiene muchísimas ganas de suceder a Larraín y darle nuevos aires a la tienda... pero que no será funcional al piñerismo.
Espina -el único ex integrante de la Patrulla Juvenil que no llegó al gabinete- cree que todavía tiene una chance en la próxima vuelta, y que ello depende de fortalecerse en RN y desde ahí negociar con quién sea el candidato del sector. No pretende interponerse en el camino de Piñera si lo ve con buenas opciones, pero no corre lo mismo respecto de Allamand, con quien ha tenido varios desencuentros en los últimos años.
¿Choque con Allamand?
Y es el recién derrotado abanderado presidencial y ahora flamante candidato a senador RN uno los obstáculos con que se pueden topar los planes del piñerismo. Allamand no ha disimulado sus aspiraciones de proyectarse al 2017, primero, ganando en Santiago Poniente y luego sucediendo a Larraín en la directiva, lo que implica un fuerte pacto entre ambos.
El ex ministro, además, sigue fuertemente resentido con Piñera , a quien culpa de parte de su derrota en la primaria, cuestión que molesta en Palacio. La indignación de Allamand -cuentan quienes han hablado con él- apunta a la demora del Ejecutivo en la ley de la franja televisiva, a la nula precisión de las encuestas de La Moneda (que le daban 10 puntos sobre Longueira), y hasta a un supuesto estancamiento de la ley que elimina el 6% a los jubilados de las FF.AA., cuestión que le pidió a su sucesor (pero rival suyo), Rodrigo Hinzpeter, que la acelerara.
Algunos creen que la dureza del quiebre rivaliza con el que tuvieron el 2010, cuando Piñera no lo nombró Canciller, y el 2011, cuando Allamand no quiso aceptar Interior.
Nadie duda de que las elecciones internas de abril próximo en RN pueden terminar convertidas en un campo de batalla decisivo para los bandos en pugna.
Además, la molestia de Piñera luego de haber sido "arrinconado" por la propuesta para reformar el binominal gestionada en secreto entre Larraín y la Concertación, evidenció otra arista que influirá en su futuro: que necesita dejar cumplidas a lo menos un par de sus promesas de campaña que hasta ahora ha frenado para no dividir a la derecha.
Como dicen sus cercanos, debe "anotarse un par de medallas".
Larroulet y el think tank
Este último punto, dicen los cercanos al Presidente, explica en parte que tras la primaria finalmente haya decidido ponerle urgencia simple al proyecto de ley del Acuerdo de Vida en Pareja (AVP) , revirtiendo su negativa inicial a hacerlo para no abrir un conflicto en el oficialismo.
Es dicha apuesta la que más dividendos podría darle. Si no se aprueba la ley de aquí a marzo, se teme que un eventual gobierno de Bachelet suba la vara hasta el matrimonio homosexual.
Lo anterior lleva a otra arista del "Plan Piñera": la futura defensa de su gestión ante eventuales críticas. Una de las decisiones ya avanzadas es que el gobernante, tras dejar el poder, se instale en una fundación, como lo ha dicho en varias entrevistas.
Entre sus cercanos se precisa que se trata de un centro de estudios , en el cual tendrá un cargo importante el actual ministro de la Segpres, Cristián Larroulet . Este -en un rol que le habría tocado desempeñar a la ex jefa del Segundo Piso, María Luisa Brahm , si no se hubiese ido al Tribunal Constitucional- concentrará la defensa de las políticas públicas del gobierno que termina en marzo.
La idea es que otros ministros también se sumen al think tank haciendo, por ejemplo, pasantías o talleres. Pero ,por sobre todo, que defiendan la imagen de Piñera. También se da como probable que su hija y hoy jefa de gabinete, Magdalena Piñera , de algún modo replique su rol actual en la fundación.
Uno de los lugares que han llamado la atención del Mandatario para instalarse es la casa donde hasta hace poco funcionaba Proyectamérica , ubicada en la calle Los Araucanos, en el barrio de Pedro de Valdivia Norte (Providencia).
Piñera, que desde la primaria ha hecho actividades públicas casi a diario y hablando de los más diversos temas, sabe que el camino al 2017 no es fácil. Con quienes ha conversado sobre su futuro, ha dicho que hay factores que pueden jugarle a favor. Especialmente si un eventual segundo gobierno de Bachelet enfrenta más protestas e inestabilidad social, ante lo cual -cree- será "recordado" y hasta "echado de menos" como un gobernante tal vez poco empático, pero muy trabajador.
No todo depende de él. En el último trimestre del año se conocerá el fallo de La Haya por la demanda peruana, que de ser adverso podría golpearlo. Además, no se lo ve remontando en los sondeos de opinión(en la última Adimark marcó 39%).
Y aunque no parece tener rivales serios si el sector vuelve a la oposición el próximo cuatrienio, aún estará por verse si sus potenciales contendores en la derecha le despejarán o le bloquearán el camino. Relevante será la performance de Longueira en noviembre y qué sectores de la UDI sobrevivan a las parlamentarias; en cualquier caso, se da por hecho que su primo Andrés Chadwick le cuidará ese flanco.
Los ministros se pronuncian y respaldan sus opciones para competir en cuatro años más
Para tomarle la temperatura al futuro del gobernante, cuatro ministros accedieron a responder las siguientes preguntas a este diario:
1.-¿Cree que el Presidente Sebastián Piñera, después de que deje el gobierno, tiene posibilidades y el mejor derecho de ser el candidato del sector para el 2017? ¿Por qué?
2.-¿Cree que la derecha debe ordenarse en torno suyo y que otros depongan sus aspiraciones?
Evelyn Matthei (Trabajo) :
1. "No existe el mejor derecho en materia de candidaturas. Sí creo que el Presidente Sebastián Piñera tiene una tremenda ventaja, que se refiere a la realización de una obra impresionante, que ya es valorada por la ciudadanía, y que será mucho más apreciada con el pasar del tiempo".
"Además, el Presidente Piñera tiene el cariño y la lealtad de un grupo importante y transversal de colaboradores".
2. "La centroderecha debe ordenarse. Independientemente de quién sea la figura principal. Francamente, esta semana hemos dado un espectáculo lamentable. Pedir a estas alturas que otros depongan sus aspiraciones, no tiene sentido. Me parece correcto que diversas figuras que tienen aspiraciones, hagan lo que deben hacer. En todo caso, en 4 años más, no me cabe duda que quien aparecerá con mayores posibilidades será el actual Presidente".
Cecilia Pérez (Vocera de Gobierno) :
1. "Cuando se tiene liderazgo, convicción, ideas y, sobre todo, capacidad de convocar a sectores amplios de la sociedad chilena, una figura política como el Presidente Piñera siempre tendrá el derecho y es una opción que muchos chilenos priorizarían para gobernar el país. Ese privilegio se lo ganó, día a día, encabezando un buen gobierno y con una capacidad de trabajo a toda prueba".
2. "En democracia todas las aspiraciones políticas son legítimas y bienvenidas. Que duda cabe, en el caso de la centro derecha chilena, que hoy el gran líder es el Presidente Sebastián Piñera, y que él y su gobierno siempre serán el referente de cualquier nuevo liderazgo".
Jaime Mañalich (Salud) :
1. "Para mí, como su ministro, creo que es una excelente opción. Si efectivamente él se allanara a pensar seriamente en repostular, yo sería de los primeros en apoyarlo y en aplaudirlo, porque la tarea y el legado de su gobierno obedecen a una persona extraordinaria. Chile puede tener el privilegio de tener dos veces el mismo Presidente".
2. "Es temprano para decirlo. Pero en el escenario de hoy, independiente de quién sea el próximo Presidente o Presidenta, claramente él es la mejor opción".
Rodrigo Pérez Mackenna (Vivienda) :
1. "Definitivamente sí, tiene las posibilidades y el mejor derecho. Ha hecho un gran gobierno, es un gran líder y un ejemplo para todos los chilenos por su capacidad de trabajo. La vara va a quedar muy alta para el próximo presidente o presidenta; sea quien sea, va a tener que lidiar con las comparaciones con este gobierno".
2. "Es muy pronto para pensar algo así, pero cuando hay un candidato muy fuerte que ha demostrado liderazgo y condiciones para ejercer el cargo, las filas se ordenan en forma natural. Y tenemos un ejemplo en la vereda de enfrente en este mismo instante: es algo natural que se da cuando hay un muy buen candidato".