El demócrata Barack Obama y el republicano John McCain, ambos candidatos a la presidencia de Estados Unidos, intentaron cortejar este sábado el voto latino, que puede ser crucial en las elecciones de noviembre.
Los dos presentaron sus propuestas en la jornada de clausura de la reunión anual de la Asociación de Funcionarios Latinos Electos (NALEO), un influyente grupo dentro de la comunidad hispana de EE.UU.
Pese a sus promesas, lo claro es que ninguno de ellos tiene todavía el apoyo de la comunidad en su bolsillo.
"Ambos tienen pros y contras. Obama tiene que luchar para que la gente lo conozca, hay muchas desinformación con respecto a él", señaló Jason Casellas, profesor en la Universidad de Texas tras escuchar los discursos de ambos candidatos.
"McCain tiene que demostrar que él es distinto a muchos republicanos que han mantenido un dura retórica antiinmigrante", resaltó Casellas.
Además, pese a que ambos defienden un mejor nivel de vida para los hispanos, incluyendo una mejor educación y salud, los dos aspirantes tienen propuestas distintas en inmigración e Irak, tal como demostraron ante una audiencia de 700 personas.
Obama afirmó que EE.UU. "no ha sido serio en resolver el problema de la inmigración ilegal" y prometió "sacar de las sombras" a los 12 millones de personas que viven en el país sin documentos.
"Un camino a la ciudadanía será una de mis prioridades desde mi primer día", expresó entre los aplausos de los asistentes.
El aspirante demócrata también criticó la construcción de un muro en la frontera con México.
"Principal prioridad"
Por su parte McCain recordó a la audiencia que él fue coautor -junto al senador Edward Kennedy- del proyecto de ley de reforma migratoria que fracasó en el senado.
"Fue, es y será mi principal prioridad", señaló el senador que ha sido fuertemente criticado dentro de su propio partido por apoyar esa reforma.
Para evitar confusiones, el aspirante republicano no habló de un camino a la ciudadanía, que es considerada por los conservadores como una amnistía, pero aseguró que todos los inmigrantes son hijos de Dios y que quiere asegurarles que abordarán "la cuestión de manera humana y compasiva".
Obama, por su parte, criticó a McCain por cambiar de postura al abogar por un cambio, compromiso que abandonó cuando empezó a buscar la nominación de su partido. Según el senador por Illinois, McCain ni siquiera apoyará "la legislación que él mismo había patrocinado si llegara a someterse a votación".
La campaña McCain, por su parte, también criticó al candidato demócrata por su "atrevimiento al cuestionar el compromiso de McCain con la reforma migratoria cuando él fue uno de los que trabajaron para matar la ley".
Guerra de Irak
El tema más espinoso, sin embargo, fue la guerra en Irak. Obama reiteró que está comprometido en "llevar la guerra en Irak a un respetable, responsable y honroso final".
McCain debió soportar cuatro interrupciones de activistas pacifistas. |
El candidato demócrata dijo que es importante utilizar los fondos de una mejor manera y enfatizó que el gasto de una semana en la guerra en Irak equivale a la ayuda exterior que EE.UU. otorga anualmente a América Latina.
A ambos aspirantes se le preguntó sobre los comentarios de un elector latino que se queja sobre el costo de la guerra "cuando los puentes se caen en este país y están construyendo nuevos en Irak".
Para McCain no fue una mañana fácil ya que debió soportar cuatro interrupciones de activistas pacifistas, que lo criticaron a gritos por apoyar la guerra. Una de ellas incluso logró desplegar una pequeña bandera rosa donde escribió "McCain igual Guerra" en español.
"La guerra en Irak fue terriblemente mal manejada. Adoptamos esta nueva estrategia y estamos ganando", argumentó McCain quién elogió en particular los inmigrantes y los latinos que pertenecen a las fuerzas armadas.
¿Convencidos?
¿Lograron convencer a los asistentes?
Obama y Clinton escenificaron este viernes su reconciliación con un acto conjunto en la ciudad de Unity. |
Una de ellas, que prefirió no decir su nombre, confesó que todavía estaba indecisa. Otros dijeron que votarían por el partido, ya fuera republicano o demócrata, aunque todavía querían escuchar más sobre las propuestas de los candidatos.
"McCain va a Colombia y México la próxima semana. No lo tiene fácil por la situación económica, mucha gente quiere cambio, pero yo creo que el conoce mejor nuestro problemas, entiende mejor lo que hay que hacer para el bien de todos", insistió Esteban Ferreiro, que apoya al senador de Arizona.
A pesar de que los latinos sólo representan en torno al 9% del electorado, la lucha está muy cerrada y este comunidad puede inclinar la balanza hacia uno u otro candidato. Además, el voto hispano es muy importante en estados muy disputados como Florida o Colorado.
Los seguidores de Obama insistieron que el senador luchará por la comunidad.
"El va a luchar por los problemas que enfrentamos todos los días, comenzando con la inmigración, pero también por la educación y la salud para todos", enfatizó Marielena, quién tenía un pequeño broche que decía "Latinos con Obama".
El senador de Illinois, sin embargo, no anunció como se esperaba un viaje a México, sino que su campaña confirmó que Obama estará viajando en los próximos días a Europa y Medio Oriente.