General J .E. Cheyre emite serias declaracion que traeran consecuencias politicas
Cheyre acusó la "sistematización de la mentira institucional"
El general (r) reiteró sus críticas al mundo político y fustigó, además, al gobierno de Michelle Bachelet por romper la "doctrina" del ex Presidente Lagos, en relación a que no se impidiera el ascenso de militares involucrados en casos de DD.HH., a menos que estuvieran procesados.
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El ex comandante en Jefe del Ejército Juan Emilio Cheyre estaba de vacaciones. Pero interrumpió su descanso el pasado domingo cuando, en una carta abierta publicada por La Tercera, decidió expresar su molestia, luego que el ahora renunciado jefe de la guarnición de Santiago, Gonzalo Santelices, decidiera abandonar las Fuerzas Armadas por las presiones que parlamentarios de la Concertación y agrupaciones de derechos humanos hicieran al Gobierno y al Ejército, dada la vinculación de Santelices en el caso Caravana de la Muerte.
A raíz de la polémica que ello suscitó, Cheyre rompió el silencio que se había autoimpuesto, pero precisó que el caso del general (r) Santelices "es la gota que desborda el agua", y su decisión de intervenir en el debate responde a "los múltiples casos en que este país sigue viviendo de la mentira y no asume la verdad".
El actual director del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad Católica aseguró que en su calidad de subordinado del ministerio de Defensa, dio a conocer, con un mes y medio de anticipación, todos los antecedentes de Gonzalo Santelices para que su ascenso fuera aprobado por la entonces titular de la cartera, Michelle Bachelet.
"En mi carácter de subordinado a la minstra de Defensa de la época y al ministro (Jaime) Ravinet (...) les di a conocer toda la verdad y todos los antecedentes, en un documento que redacté personalmente, donde a cada general se le 'desnudaba' para que fuera conocido en todos su detalles. Personalmente le entregué a la señora ministra y al señor ministro, con un mes y medio de anticipación, antecedentes detallados de la persona, de su vida profesional, de su vida privada, de la vida de su mujer", sostuvo Cheyre en entrevista en Radio Duna.
Según comentó, dicho documento era llevado a la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI), a los organismos de derechos humanos y "a todos quienes quisieran". Luego -continuó el ex uniformado-, eran devueltos al Ejército "jamás con una observación, porque nosotros nos ciudabamos de hacer nuestro trabajo y de llamar a retiro a quienes estaban comprometidos" con violaciones a los derechos humanos.
FIN DE LA "DOCTRINA LAGOS"
A juicio del militar (r), Chile atraviesa por "el momento más lamentable y peligroso para la consolidación democrática", y a modo de ejemplo mencionó los "honores" con que la Presidenta y varios ministros dieron el último adiós a Volodia Teitelboim, y los beneficios carcelarios otorgados a la activista pro mapuche Patricisa Troncoso.
"El caso del general Santelices es la gota que desborda el agua, en los múltiples casos en que este país sigue viviendo de la mentira y no asume la verdad (...) estamos en el momento más lamentable y peligroso de la consolidación democrática en Chile. La lógica de la mentira, la sistematización de la mentira institucional, el no respeto a la verdad y el no sacarse las caretas de quienes son los verdaderos fundadores del sistema del Gobierno Militar, que tanto dolor causó, no son los autores de los crímenes directos, pero sí son los autores intelectuales", afirmó el ex comandante en Jefe del Ejército.
Cheyre explicó que gracias a lo que denominó "política de Estado" existente durante la administración de Ricardo Lagos -en relación a que militares involucrados en casos de DD.HH. podrían continuar su carrera dentro del Ejército mientras no fueran procesados-, "Chile estaba transitando por una democracia en que nadie le ponía el pie encima al otro, y donde se suponía que la verdad prevalecía sobre la mentira, que la verdad iba a ser de todos y que iba a haber justicia para todos".
Sin embargo, a juicio del académico, el gobierno de Michelle Bachelet dio un giro en esta doctrina, por lo que "se rompe con la lógica del entendimiento, la lógica de la verdad, y se entrometen tres lógicas: la sistematización de la mentira institucional, el no respeto a la verdad y el no sacarse las caretas de quienes son los verdaderos padres fundadores del sistema del gobierno militar que tanto dolor causó. No son los autores directos de los crímenes, sin duda, pero son los autores de la mayor crisis política que ha vivido Chile".
Más adelante, el retirado militar sostuvo que aquellos que acusó como "autores" del golpe son "los que provocaron el odio en Chile, que no son solamente la izquierda". En este grupo Cheyre incluyó a "los que generaron la crisis más grande y no la controlaron, el gobierno de la Unidad Popular, a una oposición de la Democracia Cristiana y del partido de la derecha de la época. Todos aquellos más la Corte Suprema, más el Senado, más la Cámara de Diputados, más la Contraloría General de la República, no los autores de los hechos criminales, pero sí los autores intelectuales, los que llamaron a las Fuerzas Armadas a desnaturalizar su función (...), que siguen escondidos en el anonimato, en la oscuridad y pretenden que sean responsables personas que ni siquiera habían nacido".