Torin Douglas Redacción BBC |
Los fotógrafos se aglomeran tras las rejas del Tribunal Superior de Justicia de Londres | Como si fuera la entrega de los premios BAFTA -premios de la academia cinematográfica británica - fotógrafos, camarógrafos y periodistas están apostados esta semana frente al Tribunal Superior de Justicia de Londres. Tienen la esperanza de vislumbrar, aunque sea por unos pocos segundos, a las estrellas del momento, aunque esta vez no hay alfombras rojas, y los personajes célebres involucrados hacen su mejor esfuerzo para evitar ser el centro de atracción. Se trata del ex-Beatle Paul McCartney y su esposa, la modelo Heather Mills, quienes se encuentran en el segundo día de una batalla legal para lograr un acuerdo final de divorcio. El contingente mediático está atento, cubriendo todas las entradas del imponente edificio ubicado en el centro de la capital británica, a poco más de cien metros de esta redacción de BBC Mundo. Dos helicópteros de prensa sobrevuelan constantemente el lugar, mientras en tierra se acumulan los camiones con antenas de radio y satélite, junto a las unidades móviles de los noticieros. ¿Cuánto justifica el divorcio McCartney-Mills para semejante aglomeración de periodistas? Algunos observadores opinan que poco, comparado con la alfombra roja de los BAFTA, pero definitivamente concita más atención que la indagatoria judicial que investiga un presunto complot en la muerte de la princesa Diana. La llegada Pero fue mayor el despliegue de periodistas cuando el actor Michael Douglas y su esposa Catherine Zeta Jones presentaron su caso contra una revista española por publicar fotos de su matrimonio sin autorización. Heather Mills decidió prescindir de abogados y representarse a sí misma. | Ése sí que fue un circo mediático. Incluso el tabloide sensacionalista británico The Sun alquiló un autobús de dos pisos con payasos y chicas muy ligeras de ropa, para promocionar el suceso. Esta semana, una hora antes de que inicie la audiencia, llega al sitio un auto negro con vidrios oscuros, ingresa al estacionamiento de los tribunales, y cuando se encuentra a salvo del alcance de los periodistas, se abre la puerta y emerge Heather Mills. Sólo allí los periodistas podemos estar seguros de quién se trata, y en ese momento ni las escaleras portátiles ni los lentes de teleobjetivo pueden garantizar que consigamos una fotografía decente. Media hora después nos enteramos que Paul McCartney salió de su casa y se encuentra en camino. ¿Qué entrada escogerá? Pues no es la que hemos escogido para esperarlo, ya que lo alcanzamos a ver caminando hacia una entrada lateral. El ambiente es mucho más silencioso dentro del edificio, aunque de todas maneras hay una buena cantidad de periodistas merodeando para obtener alguna primicia. Mills ya se encuentra sentada en el tribunal, protegida por un cartel que dice "Privado. Prohibido el paso" y en ese momento, con un simple "buenos días", McCartney ingresa por la puerta. Y así esperamos. La audiencia se celebra a puerta cerrada, lejos del ojo público y los medios. La espera No hay ninguna noticia, sin embargo afuera, al acercarse la hora del almuerzo, media docena de reporteros de televisión están alineados con sus micrófonos emitiendo las últimas novedades del caso. Paul McCartney saluda a los reporteros, pero no emite comentarios. | Los periodistas pertenecientes a medios estadounidenses sienten cierto escepticismo con respecto a la historia, ya que tendrá que luchar por un puesto entre la información de las elecciones primarias. Sin embargo, no tienen problema para encontrar expertos legales que den su análisis del caso y así alimentar la maquinaria noticiosa que se mantiene imparable durante las 24 horas. En ese momento se abre la puerta de la sala 34 del tribunal y aparece Paul McCartney con su abogada, Fiona Shackleton. Ante las preguntas de los reporteros, McCartney responde con cortesía: "Sin comentarios". Mientras tanto, Heather Mills, quien decidió prescindir de un abogado y representarse a sí misma, se queda adentro de la sala esperando la llegada de un proyector y una pantalla. Esto provoca la especulación de los presentes, incluso se dice que Mills presentará un video que evidencia el acoso que presuntamente sufre por parte de los paparazzi y que le permitirían incluir gastos para seguridad personal como parte del acuerdo. Luego toma un corto descanso, pero al empezar la tarde, la pareja se vuelve a encerrar en la sala del tribunal. La argumentación legal de ambas posiciones y la espera de los medios continuarán. |