En el marco de las medidas adoptadas por el Congreso Nacional para garantizar la transparencia de los procesos de contratación de personal de apoyo a la labor legislativa, e inversión de los recursos, la comisión de Etica y Transparencia de la Cámara de Diputados determinó en dos fallos que no procedía la incorporación o mantención de asesores con grado de parentesco, en las solicitudes efectuadas por cinco parlamentarios.
Según las resoluciones publicadas en el sitio web de la Cámara, estos serían los diputados Alberto Robles (PRSD), Pedro Araya (PRI), Enrique Jaramillo (PPD), José Pérez Arriagada (PRSD) y Marcelo Schilling (PS), quienes pidieron al órgano su autorización para dar curso a la contratación de personal que ostenta lazos de parentesco con ellos.
Para estos efectos la comisión de Etica, presidida por el diputado Patricio Vallespín (DC) , e integrada por la diputada Andrea Molina (UDI), y los diputados Juan Luis Castro (PS), Aldo Cornejo (DC), Roberto Delmastro (IND), Iván Moreira (UDI), Marco Antonio Núñez (PPD), Orlando Vargas (PPD) y Felipe Ward (UDI), es la encargada de dar curso a las peticiones de los legisladores y de autorizar finalmente, las incorporaciones.
De acuerdo con la normativa vigente, el Consejo de Asignaciones parlamentarias establece que los parlamentarios deben efectuar este paso, a fin de velar por la transparencia en la selección del personal que prestar servicios de ayuda a su labor legislativa.
"Los contratos que, financiados con cargo a las asignaciones parlamentarias, se suscriban con personas sujetas a alguno de los vínculos de parentesco (…) deberán ser aprobados, mediante resolución fundada, por la Comisión de Ética y Transparencia de la respectiva Cámara, cuando concurran circunstancias excepcionales que lo hagan necesario, y siempre que se ajusten a condiciones de equidad similares a las que habitualmente prevalecen en el mercado", señala.
En la misma línea, el organismo fiscalizador plantea que, para los casos de contratación de familiares o parientes, el Consejo "exige" a los legisladores "someter oportunamente a esta Comisión las solicitudes para este tipo de contrataciones y, además, requiere que la comisión las apruebe en una resolución fundada y siempre que concurran circunstancias excepcionales que lo hagan necesario y, además, que se ajusten a condiciones de equidad similares a las que habitualmente prevalecen en el mercado"
Dentro de las excepciones, el Consejo de Asignaciones determina que éstas se darán en casos donde la contratación de un pariente amerita, por cuanto posee "una expertise propia y única que no tiene el resto de los ciudadanos o que, a lo menos, resulta escasa".
Al mismo tiempo, determina que "la circunstancia de que se trate de una persona de su confianza no habilita a los parlamentarios para el empleo de parientes"
EL CASO DEL DIPUTADO ROBLES
La última de las resoluciones adoptada en las sesiones del 19 de enero, y el 8 y 15 de marzo de 2012, responde a la solicitud realizada por el diputado Alberto Robles, quien pidió al Parlamento (ver Archivo adjunto) "bajo el amparo del reglamento a que se refiere el artículo 3° A de la ley N° 18.918", que accediera a la contratación de su pareja, la cual trabajaba con el legislador hasta el 10 de marzo de 2012, con cargo a su asignación para personal de apoyo.
La instancia explica, que en este caso la ley, "al regular con estrictez la contratación de cónyuges y parientes con cargo a recursos públicos, ha querido, por una parte, evitar todo tipo de colusión que pueda importar un perjuicio fiscal, y, por la otra, hacer efectivo el principio de probidad consagrado en la Constitución Política".
En la oportunidad, la comisión de Etica rechazó de forma unánime el planteamiento, del legislador, debido a que al evaluar la situación presentada por Robles, los legisladores plantearon que no se especifica que la pareja "o el propio parlamentario se encuentre en alguna condición de excepcionalidad, sino, por el contrario, se desprende de sus notas que, de no darse la relación personal existente entre ellos, este sería un contrato de trabajo común y corriente".
Asimismo, se precisa que la contratación se justifica "cuando concurran circunstancias excepcionales que lo hagan necesario y siempre que se ajusten a condiciones de equidad similares a las que habitualmente prevalecen en el mercado".
Dentro del fallo se acota que "al someter el diputado Robles este asunto al conocimiento y decisión de esta Comisión, está actuando con irrestricto apego al referido principio y, por lo mismo, queda plenamente sometido a la decisión que este órgano adopte frente a su presentación".
Finalmente, la Comisión también sentenció que "en el caso en la especie debe someter la presentación del referido parlamentario a los mismos controles y exigencias que si la persona a contratar fuera su cónyuge o un pariente", y que para la situación descrita por el diputado, no procedía.
LAS OTRAS RESOLUCIONES
La comisión de Etica emitió, además, una segunda resolución el pasado 20 de marzo (ver archivo adjunto).
En ella, el organismo responde a los requerimientos efectuados por los diputados Pedro Araya, José Pérez Arriagada, Enrique Jaramillo y Marcelo Schilling, para contratar a personal de apoyo en el trabajo parlamentario y que tendrían una relación de parentesco.
A diferencia del caso del diputado Robles, este segundo documento no detalla respecto del tipo de parentesco existente, las labores que estos funcionarios desempeñarían, ni tampoco el número de personas solicitadas por cada parlamentario.
Asimismo, tampoco especifica los argumentos dispuestos por los legisladores al momento de solicitar la contratación.
De acuerdo con la resolución escrita, en esta oportunidad los diputados integrantes de la comisión también declinaron por unanimidad proceder ante la solicitud de los cuatro legisladores.
La instancia determinó que, si bien las peticiones de los parlamentarios "fueron efectuadas oportunamente", éstas "no cumplen con las condiciones de excepcionalidad" citadas por la comisión, entre ellas la expertise "propia y única" de los funcionarios.
Otro de los argumentos que entrega es que "la circunstancia de que se trate de una persona de su confianza no habilita a los parlamentarios para el empleo de parientes".
De esta forma, la Comisión de Etica optó por "desestimar las presentaciones" entregadas por los cuatro parlamentarios.